Tres palestinos murieron el lunes de madrugada en una redada militar israelí en un campo de refugiados de Cisjordania, según funcionarios palestinos de salud, mientras el gobierno de Estados Unidos condenaba con dureza una nueva medida del gobierno israelí para ampliar los asentamientos.
Tropas israelíes mataron a los tres hombres durante una incursión en Balata, un campo de refugiados cerca de la ciudad de Nablus, según el Ministerio palestino de Salud. Había seis personas heridas, una de ellas en estado crítico, indicó el Ministerio. Las Brigadas de Mártires de Al Aqsa, un grupo armado relacionado con el partido del presidente palestino, señaló que los fallecidos eran miembros de su organización.
El ejército confirmó después que los soldados habían asaltado Balata. Los militares recibieron disparos y mataron a tres palestinos, añadió. Otras tres personas fueron arrestadas allí. Israel, que incrementó las redadas en el último año en respuesta a una serie de ataques palestinos, dijo haber encontrado armas y un taller de explosivos en una vivienda, que hizo explotar.