La región de Belgorod, en el sur de Rusia, fronteriza con Ucrania, fue atacada el viernes por Ucrania con artillería, morteros y drones, dijeron las autoridades, horas después de que dos drones cayeran en una ciudad rusa próxima a la anexionada península de Crimea.
Las fuerzas del Kremlin, por su parte, atacaron una clínica en Dnipró, centro de Ucrania, donde causaron la muerte de un transeúnte de 69 años e hirieron a 23 personas, entre ellas dos niños, según las autoridades ucranianas.
Asimismo, un misil ruso S-300 dio contra una presa en el distrito Karlivka, en la provincia de Donetsk, en el este de Ucrania, y ahora localidades cercanas enfrentan el peligro de severas inundaciones.
La localidad de Graivoron, en Belgorod, a unos 7 kilómetros (4,5 millas) de la frontera con Ucrania, fue atacada durante varias horas. Cuatro viviendas, una tienda, un vehículo, un gasoducto y una línea eléctrica fueron dañados, dijo el gobernador Vyacheslav Gladkov.